Andrés

Aquí encontrará los principales momentos de su vida.

Andrés nació en Betsaida, un pueblo cerca del mar de Galilea. Era hijo de Jonás y hermano de Simón Pedro. Al igual que su hermano, Andrés trabajaba como pescador antes de ser llamado por Jesús. Su pasado en una comunidad costera trabajadora moldeó gran parte de su carácter y su disposición para responder a la invitación de Jesús. Andrés fue originalmente discípulo de Juan el Bautista antes de conocer a Jesús.

En Juan 1:35-40, leemos que Andrés fue uno de los primeros discípulos en seguir a Jesús. Después de que Juan el Bautista, de quien Andrés era discípulo, declarara que Jesús era “el Cordero de Dios”, Andrés decidió seguirlo. Entonces llevó a su hermano Simón Pedro ante Jesús y le dijo: “Hemos encontrado al Mesías” (Juan 1:41).

Si bien Andrés no era considerado el líder de los doce discípulos como su hermano Simón, desempeñó un papel respetado e influyente. A menudo mencionado entre los primeros llamados, Andrés es recordado por su fortaleza discreta y su disposición a acercar a otros a Jesús, incluyendo presentarle a Simón al Mesías. Sus acciones reflejan un espíritu de humildad y un gran deseo de evangelizar.

Presentando a Jesús a otros: Uno de los momentos más significativos de Andrés se encuentra en Juan 1:40-42, donde se le registra como el primer discípulo que siguió a Jesús. Después de pasar tiempo con Él, Andrés inmediatamente encuentra a su hermano Simón y le dice: «Hemos encontrado al Mesías» (versículo 41, NVI).

Alimentando a los cinco mil: En Juan 6:8-9, Andrés es el discípulo que señala al niño con cinco panes y dos peces. Aunque no estaba seguro de cómo podría ayudar, aun así se los lleva a Jesús, un momento que conduce a uno de los milagros más conocidos.

Acercando a los griegos a Jesús: En Juan 12:20-22, algunos griegos querían ver a Jesús. Felipe se lo dice a Andrés, y juntos llevan la petición a Jesús. Este acto refleja el papel constante de Andrés como conector: alguien que acerca a las personas a Cristo.

Aunque el libro de los Hechos se centra más en otros apóstoles, se cree que Andrés continuó compartiendo el evangelio después de la resurrección de Jesús. La tradición de la iglesia primitiva sostiene que predicó en regiones como Escitia, Asia Menor y Grecia. Según relatos históricos, Andrés fue martirizado en la ciudad de Patras, donde fue crucificado en una cruz en forma de X. Se dice que enfrentó la muerte con valentía, continuando predicando incluso desde la cruz.

LAndrés ocupa un lugar especial como el primer discípulo en seguir a Jesús y acercar a otros a Él. Considerado a menudo un símbolo de humildad y evangelización, su legado es especialmente venerado en la Iglesia Ortodoxa Oriental, donde se le considera el fundador de la iglesia en Bizancio. Con frecuencia se le representa con una cruz en forma de X, recordatorio de su martirio. La vida de Andrés nos recuerda que incluso quienes trabajan discretamente en un segundo plano pueden tener un impacto duradero en el reino de Dios.