🙌 Un momento en su presencia

Mi llamado y vocación me han llevado a dedicar gran parte de mi tiempo a trabajar con personas: acompañándolas, aconsejándolas, enseñándoles, predicándoles, consolándolas, exhortándolas, animándolas, entre otras cosas. Mi día a día transcurre rodeado de personas, lo cual, por un lado, es mi pasión y, por otro, es el llamado que Dios me ha dado. Es en este trabajo donde siento que cumplo mi propósito en este mundo.
Por otro lado, soy alguien que, por naturaleza, es introvertido, por lo que necesito constantemente tiempos de soledad para recargar energías y encontrar ánimo para seguir acompañando a las personas. En contraste, mi esposa, que es extrovertida por naturaleza, parece que entre más tiempo pasa rodeada de personas, más energía adquiere.
por eso me encanta y me siento tan identificado con Jesús, quien, como vemos en la Biblia, buscaba constantemente tiempos de soledad. Un ejemplo claro es lo que ocurrió después de realizar uno de los milagros más conocidos de Su ministerio: la alimentación de los cinco mil. Jesús acababa de pasar todo un día orando, sanando y alimentando a una gran multitud, al menos cinco mil personas. Después de esto, la Biblia nos dice:
“Después de despedir a la gente, subió a la montaña para orar a solas. Al anochecer, estaba allí él solo” (Mateo 14:23).
Jesús sabía que la única manera de sobrellevar las cargas del día a día, el cansancio de las expectativas de otros sobre él, así como la carga de saber todo lo que tenía por delante, era pasar tiempo a solas en oración con Dios.
Amigo/a, ¿cómo lo haces tú? ¿Cuál es tu forma de recargar ánimo, energía y fuerzas? ¿Dónde dejas tus cargas? Todos necesitamos encontrar esa “montaña” donde podemos estar a solas con Dios, es la única manera de seguir adelante. Recordando que no hay carga tan pesada que no pueda ser aliviada en la presencia de Jesús
Vengan a mí los que están cansados y cargados, vengan conmigo y descansen… Esta es una y otra vez la invitación de Jesús. Sin embargo, muchas veces pareciera que preferimos seguir llevando las cargas, seguir cansados y luchando sin ánimo y energía en vez de aceptar su invitación y apartar tiempo para estar con Él.
¿Por qué no pruebas aceptar Su invitación hoy y ver cómo se siente descansar en Él? Quién sabe, tal vez descubras lo hermoso que es experimentar su paz y hagas un hábito pasar tiempo a solas con Él. Por lo menos, esa es mi oración para ti.

