Fecha de publicación 26 de sep. de 2024

☎️ Un Llamado Desafiante

Fecha de publicación 26 de sep. de 2024

Mi hija de tres años acaba de aprender el poder de la palabra “¿por qué?” Ante cada petición que viene de su mamá o de mí, lo primero que indudablemente sale de su boca es “¿por qué?” Si nos pide dulces y le decimos que solo puede comer uno, pregunta “¿por qué no dos?” Si le decimos que solo puede jugar un rato con sus amigos, nos pregunta “¿por qué no mucho?” Lo cual puede llegar a ser sumamente frustrante, pero no negar que el corazón humano es así, queremos que las cosas se hagan como nosotros queremos.

La parte del Padre Nuestro de la que quiero hablarte hoy es hermosamente desafiante!

Esta parte es el llamado de Dios a rendir toda nuestra vida a Él. Leamos juntos la continuación de la oración:“Venga tu reino y hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo” (Mateo 6:10).

Sin duda, esta parte de la oración Jesús lo practicaba diariamente, ¿como lo sabemos? Porque esta parte es un reflejo de la oración de Jesus en Getsemaní (Mt 26:38-42).

“Padre mío de ser posible pasa de mí esta copa, pero no se haga como yo quiero, sino hágase tu voluntad”, qué difícil es verdaderamente rendirnos a su voluntad, que difícil es para nosotros decir no se haga como yo quiero, que difícil es decir a Dios hágase tu voluntad.

Amigo/a, ¿en qué área de tu vida luchas más para rendirte a la voluntad de Dios?

Jesús nos invita a ti y a mi a orar, diciendo que su voluntad se haga, tanto en el cielo donde reina como Rey, como en tu vida, finanzas, relaciones, trabajo, decisiones, familia, matrimonio, hábitos, en resúmen, en cada área de nuestras vidas.

Para nosotros es difícil no buscar hacer nuestra voluntad, cuesta comprometerse a permitir que sea la voluntad de Dios la que se cumpla, sobre todo si no la entendemos, si no nos gusta, o si va en completamente en otra dirección que nuestro deseos.

A veces me comporto igual que mi hija de tres años, diciendo a Dios… ¿Por qué; porque no así, porque por acá y no por allá, porque no puedo hacer eso, porque debería hacer aquello? etc.

Sin embargo, Jesús te dice que el camino hacia una verdadera intimidad con Dios, empieza con este llamado a rendirnos a su perfecta voluntad. Sabiendo que Él siempre quiere lo mejor para nosotros.  

Amigo/a, ¿estás dispuesto/a a vivir este llamado? ¿Qué te está pidiendo Dios que le rindas hoy?

No lo olvides nunca: ¡Eres un Milagro!

Eleazar Diaz
Author

Pastor principal de una iglesia y director de un programa de discipulado y misiones en Guadalajara, México. Mi pasión es que cada persona pueda tener una relación intima y apasionada con Dios.