Amigo/a, 🔥 Un fuego vivo arde en ti
Intro · Bienvenida · Milagro · Reflexión · Alabanza · Oración
Deseo que esta serie te esté bendiciendo, y que cada uno de estos versículos te esté ayudando a profundizar en áreas concretas de tu fe, para crecer en ellas.
El cuarto versículo dice: "No apaguéis al Espíritu" (1 Tesalonicenses 5:19).
Nuestro Dios es un fuego consumidor (Hebreos 12:29), y el Espíritu Santo que habita en nosotros tiene esa misma naturaleza viva.
No es casualidad que en Pentecostés, cuando los cristianos recibieron la manifestación del Espíritu Santo, viniese a sus vidas en forma de llama de fuego. ¡Él quiere incendiarnos en amor y pasión por Dios!
Sin embargo, en nuestro día a día podemos apagar esa llama sin darnos casi cuenta. Los problemas de la vida, las distracciones, los temores, las prisas, las responsabilidades... todo eso nos lleva a perder de vista lo que es realmente importante, y puede apagarnos espiritualmente si no tenemos cuidado.
Incluso en los avivamientos más famosos de la historia, en los que el Señor ha tocado a millones de personas y donde ha habido todo tipo de milagros, al final ha habido un momento en el que ese fuego ha cesado.
Sin embargo, esta no es la voluntad de Dios. Él nos ha llamado para vivir en un avivamiento constante como iglesia, para caminar en ese Fuego Santo, y que ese fuego crezca hasta cambiar literalmente el mundo entero.
De hecho, me gustaría de nuevo darle la vuelta a la situación que plantea este pasaje: Si podemos apagar al Espíritu, ¿quiere eso decir que podemos también "encenderlo"? ¡Sí, podemos! ;D
El Señor no te pone un límite: puedes estar tan cerca de Él como quieras, y arder en Su amor tanto como lo desees. ¡De hecho, cuánto más te acerques a Él, más se acercará Él a ti! (Santiago 4:8)
Amigo/a, ¡aviva el fuego de Su Espíritu hoy en tu vida!
Te quiero animar a que inviertas unos minutos hoy a orar y a expresarle a Dios cuánto deseas tener ese fuego viviendo en ti, y a que le pidas que te revele más acerca de qué cosas prácticas puedes hacer a partir de ahora para experimentar más Su Presencia viva en ti.
Brilla y arde en el fuego de Su amor,