Amigo/a, 😉 ¡Tu victoria se encuentra en el reposo de Dios!

Seguimos avanzando en el precioso Salmo 23, y hoy nos toca analizar la continuación del versículo de ayer, que dice: “Junto a aguas de reposo me pastoreará” (Salmo 23:2).

El reposo es una de las claves más importantes de nuestra vida en Cristo, aunque a veces no nos demos cuenta de ello.

De hecho, el Señor dijo ya en el Antiguo Testamento al pueblo de Israel: “En descanso y en reposo seréis salvos; en quietud y en confianza será vuestra fortaleza” (Isaías 30:15).

Cuando estamos agitados por las situaciones de la vida, o cuando somos presionados por el miedo, entramos en un estado de confusión que nos lleva a tomar malas decisiones, a movernos por nuestro propio instinto de supervivencia más que por la fe, y eso siempre termina mal: produce un mal fruto para nuestra vida.

Sin embargo, cuando somos capaces de calmarnos, y de empezar a pensar en Dios, cuando empezamos a hablar con Él, es ahí donde podemos experimentar paz, descanso, claridad, fuerzas renovadas, y es ahí donde encontramos finalmente la sabiduría y el ánimo para dar los pasos correctos.

Esa claridad siempre está asociada al reposo que viene de parar y buscar a Dios en medio de las situaciones complicadas del día a día.

A lo largo de mi vida y de los cientos y miles de situaciones complicadas por las que he tenido que pasar, he podido experimentar esta realidad una y otra vez: Cuando echo mi ansiedad a Sus pies y empiezo a descansar en Él, aferrado a Sus promesas, es ahí cuando Dios puede ministrarme, guiarme, darme claridad, fortalecerme y bendecirme… como el Buen Pastor que es.

Amigo/a, ¡tu victoria se encuentra en el reposo de Dios!

Su Presencia es como ese prado verde que veíamos ayer, que tiene un río precioso a su lado, y en el cual puedes simplemente venir ahora y descansar, confiado en que Él está contigo en medio de cualquier situación que estés atravesando.

Él es tu Buen Pastor, y puedes estar descansado en Él, porque sabes que Él pelea por ti y te cuida, porque te ama de lo más profundo de su ser.

Te quiero animar a que hoy, en medio de las situaciones por las que puedas estar pasando, que puedas poner los miedos, las inseguridades, el estrés y todas esas cosas a un lado, y que puedas sencillamente venir al Lugar de Su Presencia, para refrescar tu alma, y llenarte de nuevo de Su fe y de Su paz.

Llénate de Su reposo en este día, para que puedas así avanzar con fuerza desde una posición de descanso y claridad, y no desde una posición de agitación y confusión.

El Señor está contigo, y te invita a Sus aguas de reposo en este día. ¡No faltes a la invitación! =)