Amigo/a, ✉️ Trae tus Cartas ante Dios
Intro · Bienvenida · Milagro · Reflexión · Alabanza · Oración
Estoy muy contento de que podamos juntos avanzar en este tema tan importante. ¡Sí, Dios quiere ayudarte a vencer la intimidación de las tinieblas en tu vida!
Ayer veíamos cómo Goliat intimidaba a Israel con sus palabras, paseándose de manera desafiante. Sabía que Israel estaba intimidado por él, y se sentía fuerte.
Esa es siempre una de las estrategias de las tinieblas: hacernos sentir que somos pequeños, y que no podemos luchar contra ese problema que nos intimida. Y para eso, siempre usa la mentira.
Una historia de la Biblia que me inspira especialmente es la del rey Ezequías y las amenazas del rey de Asiria.
Rabsaces, emisario del rey de Asiria, trató de desmoralizar y engañar al rey Ezequías, y a todo el pueblo de Judá. El rey de Asiria había conquistado todos los pueblos alrededor, y su avance era implacable. Rabsaces:
- Ridiculizó la capacidad militar de Judá, al compararla con el ejército de Asiria (2º Reyes 18:24).
- Trató de confundirles diciendo que era, de hecho, Dios mismo el que les había enviado a destruirlos (2º Reyes 18:25).
- Y al final del todo, trató de hacerles dudar de Dios mismo, diciendo a Ezequías: "No te engañe tu Dios en quien tú confías, para decir: Jerusalén no será entregada en mano del rey de Asiria..." (2º Reyes 19:10).
¡Esa es la forma en la que las tinieblas funcionan! El enemigo quiere mostrarse grande, pero la única forma real que tiene de conseguirlo es intentar engañarnos y confundirnos, para que creamos que somos pequeños, que no tenemos nada que hacer, y que dudemos incluso de Dios.
Dice la Biblia que Ezequías tomó las cartas que Rabsaces le había dado de parte del rey de Asiria, subió a la casa de Dios, y allí, en el templo, "las extendió Ezequías delante de Jehová" (2º Reyes 19:14). Ezequías abrió su corazón delante de Dios.
Su respuesta no tardó en venir: no solo Dios le habló al corazón y le confirmó, sino que, de la noche a la mañana, la gran mayoría del ejército asirio fue destruido, y el rey Asirio tuvo que huir despavorido. ¡En un momento, Dios dio la vuelta completamente a la situación!
Amigo/a, toma hoy todas las amenazas, miedos, burlas de las tinieblas en tu vida, y tráelas ahora mismo ante la Presencia de Dios. Expónselas, y deja que Él te confirme, y que trate con esa situación. ¡Dios sabe qué hacer, y cómo hacerlo!
Te invito a orar conmigo en el vídeo de hoy, haciendo clic en este enlace