Amigo/a, 💪🏻 Tienes Poder sobre tus Pensamientos
Una de las primeras formas de renovar nuestra mente es estando atentos al tipo de cosas en las que pensamos.
Los pensamientos que habitan en nosotros dan forma a nuestra manera de pensar, y de ser.
Mira lo que dice este pasaje de la Biblia: “No comas pan con el avaro, ni codicies sus manjares; porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él” (Proverbios 23:6–7).
Los pensamientos que albergamos en nuestro corazón son los que dan forma a nuestra forma de ser:
- Si tienes pensamientos de ira, reaccionarás de manera airada en tu día a día, casi sin darte cuenta
- Si albergas pensamientos de tristeza o depresión, te sentirás abatido todo el tiempo, sin fuerzas, depresivo/a…
- Si dejas que haya en ti pensamientos de impureza, te será más fácil caer en tentaciones, y sentirte fracasado/a y culpable
Y lo mismo ocurre con el resto de pensamientos, tanto los buenos como los malos: todos ellos pintan una realidad en nuestra mente, y esa imagen determina nuestra forma de actuar, nuestro comportamiento, y nuestras decisiones.
Quizá sientes que, si ese es el caso, no puedes hacer nada, ya que no puedes controlar los pensamientos que vienen a tu mente… y aquí es donde está precisamente la clave: ¡Puedes determinar los pensamientos que dejas que estén en tu mente!
Tienes capacidad de decisión: no estás a merced de cualquier pensamiento que venga a tu mente, sino que puedes, con la ayuda del Espíritu Santo, discernir los pensamientos que hay en tu mente, rechazar aquellos que son malos, y reemplazarlos por aquellos que son según el corazón de Dios.
Yo empecé a hacer esto hace muchos años atrás, y cambió radicalmente mi día a día y mi forma de enfrentar cada situación que se cruza en mi camino.
Amigo/a, ¡tienes poder sobre tus pensamientos! En los próximos días voy a profundizar en este tema, pero hoy me gustaría animarte a que hagas una cosa: pídele a Dios que ayude a discernir el tipo de pensamientos que sueles tener en tu día a día, y está atento a todos ellos durante este día.
De hecho, quiero animarte a que crees una pequeña nota en el teléfono o en un cuaderno, y que estés atento/a para escribir rápidamente en ella los pensamientos que te vengan durante el día. ¡Creo que te sorprenderás de ver cuántas veces piensas en ciertos temas sin casi darte cuenta, y cómo eso te afecta!
Te dejo con este ejercicio, y mañana nos vemos ;)