Amigo/a, 👣 ¡Te persigue!
En las primeras horas del día, aún antes del alba, cuando el mundo aún yace en la penumbra del sueño, su mano tierna se posa sobre ti, como un padre amoroso que guía a su hijo/a por el sendero incierto de la vida. Cada mañana, al despertar, puedes estar seguro/a de su presencia fiel, como un faro en la oscuridad, iluminando tu camino con su gracia inquebrantable.
Y así, mientras puedas estar atravesando los altibajos del vivir diario, su mano no te abandonará nunca. En los momentos de duda y temor, cuando las sombras de la incertidumbre amenazan con eclipsar tu fe, su voz suave te susurra palabras de aliento, recordándote que Él está contigo en cada paso que das.
Puedo afirmar con certeza, que su bondad, me ha sostenido en medio de la adversidades. Cuando mis fuerzas flaqueaban y el desánimo amenazaba ¡su gracia me sostuvo!
Sé que su bondad te persigue incansablemente. En cada paso que das, en cada decisión que tomas, puedes sentir su mano amorosa guiándote, animándote y levantándote cuando tropiezas. Su amor inagotable es tu fuerza, consuelo y esperanza en medio de las pruebas y tribulaciones de este mundo.
Por eso, te digo, Amigo/a, ¡que su bondad te seguirá todos los días de tu vida! No importa cuán oscuro sea el valle que atravieses, no importa cuán ardua sea la batalla, su misericordia nunca te abandonará. ¡Confía en su amor incondicional! Encontrarás la paz y la fortaleza que necesitas para perseverar.
Quiero recordarte, Salmo 23:6 (RVR1960): “Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa de Jehová moraré por largos días.”
Pido a Dios, que esta verdad sea tu ancla en medio de la tormenta, y que la certeza de su amor eterno te sostenga en todo momento.
¡Su bondad te persigue!