🧭 ¿Te has sentido perdido y sin rumbo?
No sé si ya te lo había contado, pero tengo un terrible sentido de la orientación geográfica. Por eso, Google Maps se ha convertido en una de las aplicaciones más útiles de los últimos años. Antes de Google Maps mi vida consistía en ensayo y error en cuanto a ubicación. No tienes idea de cuantas veces me he perdido o, peor aún, me he sentido perdido.
Lo uso prácticamente todos los días, y aunque a veces me lleva por caminos… digamos interesantes, siempre me lleva al destino deseado. Cuéntame, ¿eres de esos que, como yo, necesitan de Google Maps o Waze todo el tiempo para no perderse?
La realidad es que la sensación de estar perdido la he experimentado tanto en el sentido de la orientación geográfica como también en otras áreas de mi vida.
Por ejemplo: una buena parte de mi juventud me sentí perdido y sin rumbo en cuanto a mi propósito de vida. En otra época me sentí desorientado en mi crecimiento espiritual y en mi relación con Dios.
Amigo/a, ¿alguna vez te has sentido así… perdido y sin rumbo?
Si te identificas conmigo, entonces te va a encantar la oración de David en el Salmo 25:4-6, es una oración que en más de una ocasión le hecho a Dios: “Señor, hazme conocer tus caminos; y enséñame tus sendas. Encamíname en tu verdad. Y enséñame, porque tú eres mi Dios y mi salvación. ¡En ti pongo mi esperanza todo el día!”
Me encanta esta verdad: en Dios y con su Espíritu Santo en nosotros, tenemos el Google Maps divino que nos muestra y guía por la senda correcta, en el camino que Él ha trazado para nosotros. Aunque, a veces, Dios nos revela todo el camino hasta la meta, y a veces solo nos muestra cual es el siguiente paso. Pero lo que nunca falla es su guía cuando nos sentimos perdidos y sin rumbo.
Si te identificas con esta oración, qué tal si oramos juntos…
Padre, hoy reconozco que te necesito, te necesito profundamente, necesito tu dirección, Señor hazme conocer tus caminos, Dios mío muéstrame a donde tú quieres dirigirme, tú eres mi única esperanza, tú eres mi Dios y mi salvación, en ti confió y en ti espero para tomar el siguiente paso, amén.
