Fecha de publicación 11 de ago. de 2021

Amigo/a, pon el cartel de “No molestar”

Fecha de publicación 11 de ago. de 2021

Una cosa que siempre me ha resultado simpática son los cartelitos de las habitaciones de los hoteles. Sí, esos que se cuelgan del pomo de la puerta, por fuera, y que sirven para indicar que no quieres ser molestado, o que ya pueden entrar para limpiar la habitación.

¿Te sientes en ocasiones acusado por tus errores del pasado? No sé tú, pero a mí de vez en cuando mis errores del pasado llaman a la puerta de mis pensamientos para intentar recordarme lo torpe o lo fracasado que puedo llegar a ser. 

Recuerdo que cuando conocí a Jesús y le entregué mi corazón, mi vida fue totalmente transformada. Sin embargo, cuando en ocasiones venían estas malas memorias del pasado, cometía el error de abrirles la puerta e invitarlas a entrar. No me hacían ningún bien: de hecho, siempre dejaban en mí una sensación de inferioridad, que me llevaba incluso a dudar acerca de hasta qué punto podría Dios realmente obrar en mi vida, o utilizarme para bendecir a otros. 

El Salmo 103 continúa diciendo: “Él es quien perdona todas tus iniquidades” (Salmo 103:3). Fíjate bien en la cantidad de pecados que Él perdona: TODOS. No hay ninguno que se escape. Quizá en el fondo de tu corazón te sientes aún avergonzado por ciertas cosas que hiciste cuando no conocías a Jesús, o por pecados que aún te persiguen, pero hoy es tiempo de cerrar esa puerta, y de poner un cartel fuera que ponga: “No molestar”.

Sí, Amigo/a, Dios ya te ha perdonado. La pregunta es: ¿te has perdonado a ti mismo? Ya no eres quien solías ser, y si hay pecados que aún te persiguen, no tienen en verdad nada que ver con tu nueva identidad. En el Nombre de Jesús, eres libre de los errores del pasado y de los pecados del presente, porque en Él tienes victoria para ser esa nueva persona que Él te llama a ser. 

En este día levántate en oración, y cierra la puerta en tu mente a todas esas mentiras del enemigo que vienen contra ti para desanimarte. No las aceptes, no las dejes entrar, porque eres una nueva persona en Cristo, y “las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas” (2 Corintios 5:17).

No lo olvides nunca: ¡Eres un Milagro!

Christian Misch
Author

Pasionado de las nuevas tecnologías y autor de "Un Milagro Cada Día", compartiendo inspiración diaria para seguir a Jesús.