Fecha de publicación 20 de sep. de 2023

Amigo/a, 🦁 ¡No te dejes intimidar por los leones!

Fecha de publicación 20 de sep. de 2023

Seguimos avanzando en esta historia tan inspiradora, y hoy vamos a centrarnos en uno de los momentos más interesantes del relato: cuando el rey confronta a Sadrac, Mesac y Abed-nego.

El rey, molesto por lo que le acaban de contar acerca de ellos, les manda llamar, y les habla de una manera muy interesante. Vamos a analizarlo (Daniel 3:14-15)

  • Primero les pregunta si es verdad que no quieren postrarse ante la estatua
  • Luego les pregunta si están dispuestos a postrarse en ese mismo momento ante ella
  • Inmediatamente después les amenaza de las consecuencias de no hacerlo (el horno de fuego)
  • Y por último, les dice solapadamente que su Dios no podrá librarles de ese horno

Lo más interesante es que les dice todo esto… ¡a la vez, de golpe! No les da tiempo a contestar a cada punto (parece ser que el rey Nabucodonosor no estaba demasiado acostumbrado a tener conversaciones… 😂*)*

No sé si alguna vez te has sentido intimidado por las situaciones que te rodean, o avasallado por personas que tenían más poder que tú desde un punto de vista humano.

Al enemigo le gusta mostrarse más grande de lo que realmente es, para tratar de intimidarnos, y le gusta mostrarse feroz para bloquearnos y llevarnos a hacer lo que nos dice.

Es por eso que la Biblia dice: “Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; al cual resistid firmes en la fe…” (1 Pedro 5:8–9).

El peligro más grande al que podemos enfrentarnos en esos momentos es la oferta que el enemigo trata de hacernos. Nos intenta hacer ver que hemos cometido un grave error, y que estamos a punto de ser aniquilados por ello, pero que aún estamos a tiempo de corregir.

Nos da una última oportunidad para adorar a la estatura de oro y ser libres de todos los problemas que nos vendrán si no lo hacemos. Y aquí es donde está la trampa, en esa oferta envenenada que parece ser la solución.

¡Es ahí donde tienes que resistir con más fuerza que nunca! Puede parecer contradictorio para nuestra lógica humana, pero la única solución que tienes en esos momentos es agarrarte a Dios con todas tus fuerzas, por fe, y resistir con valentía al enemigo, como dice el pasaje que acabamos de leer.

Al hacer eso es cuando te alineas con un poder que es mayor que el poder del enemigo o el de las personas que quieren hacerte daño: el poder de Dios. Es en esa fe que estás abriendo la puerta a Dios para que pueda venir y hacer milagros que creen un impacto en tu vida, y que te den la victoria que necesitas en esa situación. ¡En mi vida he experimentado esto tantas veces!

Amigo/a, no te dejes intimidar por los rugidos de los leones de este mundo: ¡Resísteles firmes en la fe, hasta que no les quede otro remedio que salir huyendo!

Nunca lo olvides: El Dios que vive en ti es muchísimo más poderoso que ellos, y Él tiene una victoria preparada para ti de antemano

No lo olvides nunca: ¡Eres un Milagro!

Christian Misch
Author

Pasionado de las nuevas tecnologías y autor de "Un Milagro Cada Día", compartiendo inspiración diaria para seguir a Jesús.