Amigo/a, 🌾 Multiplicación y Victoria
Intro · Bienvenida · Milagro · Reflexión · Oración · Alabanza
Ya estamos casi llegando a esta serie tan especial sobre uno de mis salmos favoritos, el salmo 1.
Este salmo enumera las bendiciones que se manifiestan en aquellos que siguen las tres reglas que hemos mencionado a lo largo de estos días, y continúa diciendo “que da su fruto en su tiempo, y su hoja no cae” (Salmo 1:3).
Dios quiere que tengas una vida fructífera. Jesús lo expresó de esta manera, diciendo: “En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos” (Juan 15:8).
Cuando obedecemos a Dios y tenemos una relación viva con Él, hay dos tipos de frutos que se manifiestan en nuestras vidas: el fruto del Espíritu Santo, y las bendiciones de Dios como fruto de esa obediencia.
De hecho, ya en el Antiguo Testamento se hablaba de las bendiciones que Dios quería derramar sobre Su pueblo, como las que podemos encontrar en el capítulo 28 del libro de Deuteronomio. Estas son unas cuantas de ellas:
- Bendición en nuestras relaciones
- Bendición en nuestro trabajo
- Bendición en nuestros negocios
- Bendición en nuestros hijos
- Multiplicación y Victoria
¡Wow, es tan precioso! Yo quiero la bendición de Dios en todas estas áreas, ¿y tú? =) Pero sinceramente, lo que más anhelo es a Él. ¡Él es todo, y sin Él nada tiene sentido!
Amigo/a, que tu amor por Dios inunde tu vida de fruto en todas las áreas de tu vida, tanto en lo espiritual como en lo físico. Y que como termina diciendo el versículo de hoy, puedas siempre mantenerte en esa frescura, sin que tu hoja caiga, siempre listo para florecer con Su Presencia.