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Fecha de publicación 4 de may. de 2025

✋🏻 Lo que puede estar frenando tu sanidad

Fecha de publicación 4 de may. de 2025

Recuerdo una etapa en la escuela de entrenamiento misionero. Parte de nuestra tarea era orar por personas enfermas. Pero muchas veces, después de orar, no veíamos sanidad inmediata. Entonces le hacíamos una pregunta clave: “¿Tienes que perdonar a alguien?” Y sorprendentemente, muchas personas responderían que sí. Cuando perdonaban, eran sanadas en el acto.

Así es, Amigo/a, la falta de perdón puede ser un obstáculo real para la sanidad. David lo expresó claramente en el Salmo 32:3: "Mientras guardé silencio, mis huesos se fueron consumiendo por mi gemir de todo el día."

A veces oramos por sanidad física pero no entendemos por qué el dolor persiste. Buscamos médicos, tratamientos, soluciones… pero olvidamos mirar hacia adentro. El cuerpo puede enfermar, pero también se resiente a sanar cuando el alma guarda lo que debería soltar.

La falta de perdón es una carga invisible pero pesada. Nos roba la paz, nos llena de pensamientos tóxicos, nos desgasta. Y esa tensión no solo afecta el corazón emocionalmente: también puede debilitar el cuerpo.

Amigo/a, Dios quiere sanar tu cuerpo y también restaurar tu vida por completo. Y a veces, esa sanidad integral comienza con un acto sencillo pero profundo: perdonar a quien te hirió, o perdonarte a ti mismo.

No se trata de justificar lo que pasó, sino de liberarte de su dominio. Cuando perdonas, en ese mismo momento, algo se rompe. Algo se libera. Algo sana.

Jesus te hace está pregunta: “¿Quieres ser sano?”. Si sientes que la falta de perdón está frenando tu sanidad, ya sea física, emocional o espiritual, este es el momento de soltar y perdonar. Porque solo así podrás caminar en la libertad y en la sanidad completa que Él ya preparó para ti.

Oro para que el amor de Jesús te envuelva, sane tus heridas y restablezca por completo tu salud.

No lo olvides nunca: ¡Eres un Milagro!

Lorena Fitzgerald
Author

Formo parte del Ministerio de la Mujer de mi iglesia y hago coaching con mujeres. Disfruto compartir y ayudar a otros en su viaje espiritual.