Amigo/a, 🐫 ¡Lo que haga falta!
Espero que esta serie te esté inspirando, y que cada vez te sientas más animado a saltar de la barca y dar pasos de fe en todas las cosas que Él te llama a hacer durante estas Navidades ;)
En muchos países de la cultura hispana, se celebra la fiesta de los "Reyes Magos", en la que Melchor, Gaspar y Baltasar traen regalos a los niños =)
La Biblia no explica gran cosa de estos magos que fueron a visitar al niño. De hecho, me gustaría que analicemos todo esto desde la perspectiva de nuestros protagonistas de esta semana, José y María, que están en medio de la aventura de fe a la que Dios les ha llamado
Ellos estaban aún en Belén, después de que Jesús naciera, y seguramente no tendrían demasiadas provisiones, ni sabían muy bien cuál era el siguiente paso a dar.
En medio de su espera, un día, de repente, unas personas llaman a la puerta. Son unos extranjeros, probablemente gentiles venidos de oriente, de la región persa. Una gran sonrisa les acompaña, porque han encontrado lo que buscaban desde hacía semanas: al Rey de los Judíos.
La Biblia dice que: "al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra" (Mateo 2:11).
Imagínate cómo debían sentirse José y María:
- Dios había hecho venir a estas personas, que vivían probablemente a unos cientos de kilómetros de distancia
- Había enviado una estrella especial para guiarles por el camino hasta la misma puerta de su casa (quizá, de hecho, era un ángel enviado para guiarles)
- Estas personas adoraron al niño, y proclamaron que era el Rey de los Judíos, lo cual confirmaba aún más todo lo que José y María habían creído.
- Y además, les ofrecieron tesoros con un carácter profético, pero que, en ese momento, fueron la provisión que José y María necesitaban para salir adelante.
Puedo imaginarme a José y María saltando de alegría al ver este tipo de situaciones. ¡Con razón dice la Biblia que María “guardaba todas estas cosas en su corazón”! ¡Lo que Dios hace es increíble!
Sí, Amigo/a, ¡Dios sabe cómo proveerte, inspirarte, animarte, y fortalecerte en la misión que te ha dado por hacer! Y si para ello tiene que traer a alguien de la otra punta del mundo, sin duda lo hará ;)