Amigo/a, ¡estoy en la gloria! 🏖
¿Has oído alguna vez la expresión “Estar en la gloria”? Es una expresión que utilizamos cuando nos encontramos muy bien, muy a gusto.
Hay momentos en los que la gloria parece ser lo más opuesto que hay a nuestra realidad. Los problemas nos rodean, las inseguridades nos acechan, y no sabemos muy bien qué hacer ni cómo hacerlo. En esos momentos, podemos llegar a sentirnos como si no hubiese esperanza. Pero nunca lo olvides, Amigo/a: ¡nuestro Dios es un Dios de esperanza! Él quiere restaurar en ti una esperanza plena, gloriosa.
Así es como la denomina el Apóstol Pablo, cuando dice que Cristo en nosotros es nuestra “esperanza de gloria” (Colosenses 1:27). Así lo dice la Nueva Traducción Viviente: “Y el secreto es: Cristo vive en ustedes. Eso les da la seguridad de que participarán de su gloria” (Colosenses 1:27, NTV). Tenemos una esperanza que trasciende este mundo, pero que empieza en este mundo: la esperanza de vivir en la Gloria de Dios. Y no solo cuando estemos en el Cielo, sino aquí y ahora en la Tierra.
A lo largo de esta semana vamos a reflexionar acerca de la esperanza verdadera que Dios nos da en medio de las situaciones complicadas.
¿Te apetecería orar ahora conmigo? “Señor, gracias porque en Ti tenemos una esperanza gloriosa que nos envuelve, y nos ayuda a seguir adelante, aun en medio de los problemas. Te pido que cada día me llenes más y más de Tu esperanza, para que pueda ver el mundo con Tus ojos. En el Nombre de Jesús. ¡Amén!”
Te llevo en mi corazón.