Fecha de publicación 7 de nov. de 2024

❤️‍🔥 Este anhelo me consume…

Fecha de publicación 7 de nov. de 2024

Algo que me encanta del libro de Job es ver a un hombre atravesar las peores situaciones posibles y, aun así, no perder la esperanza en Dios.

Esperanza es una palabra muy especial, ¿no crees? Déjame compartir algunos significados bíblicos de esta palabra. Elpis es la palabra griega que significa anticipar o tener una expectativa de lo que es certero o seguro. ¿Te suena familiar? Es básicamente lo que dice Hebreos: “Es, pues, la fe la certeza de nuestra esperanza”.

Otra imagen muy hermosa que nos ofrece la palabra sobre esto es la palabra hebrea para esperanza, que es Tiqvah. Esta palabra significa literalmente cordón o cuerda, y se utiliza en la historia de Rahab, por ejemplo, cuando, para ser salvada de la destrucción, tenía que colgar un cordón, un tiqvah, en su ventana. Es decir, literalmente, su esperanza era ese cordón.

La esperanza en la Biblia tiene una certeza llena de gozo. Por eso me encanta esta palabra y prefiero este significado en comparación con el que usamos en nuestro día a día, que suele ser más una posibilidad no segura.

Por lo mismo me encanta y me anima profundamente cuando leo en Job estas palabras; “Yo sé que mi Redentor vive y que al final se levantará sobre el polvo. Y, cuando mi piel haya sido destruida, todavía veré a Dios con mis propios ojos. Yo mismo lo veré con mis propios ojos; yo lo veré, no otro. ¡Este anhelo me consume!”  (Job 19:25-27). 

Esta es la clave para hoy sobre cómo podemos enfrentar la depresión: nunca perder la esperanza en lo que Dios está haciendo.

Es tan fácil, en esos momentos, perder de vista todo y solo enfocarnos en el dolor, en la desesperanza, en la tristeza o en la situación que tenemos delante. Esto nos lleva a creer que nunca saldremos de ahí y que no hay nada más por delante. Sin embargo, me encanta cómo Job expresa su anhelo profundo por ver lo que Dios hará en su vida. 

Amigo/a, nunca pierdas la esperanza en Dios, o sea, nunca pierdas la certeza de que si le has entregado tu vida, él está obrando a tu favor, y en su momento podrás verlo y llenarte de gozo por la obra tan maravillosa que Dios ha hecho en ti, ¡te lo digo por experiencia!

Permíteme orar por ti; Padre celestial, Padre bueno y Dios bueno, hoy quiero orar por la persona que está leyendo o escuchando este devocional, y hoy necesita poner su esperanza en ti, hoy necesita tener la certeza de que tú estás obrando por su bien, que tu estas luchando por su bien y de que él verá a su redentor, en tu nombre oro, amén.

No lo olvides nunca: ¡Eres un Milagro!

Eleazar Diaz
Author

Pastor principal de una iglesia y director de un programa de discipulado y misiones en Guadalajara, México. Mi pasión es que cada persona pueda tener una relación intima y apasionada con Dios.