Fecha de publicación 5 de mar. de 2021

Amigo/a, eres el reflejo de Dios en esta tierra

Fecha de publicación 5 de mar. de 2021

¡En el mundo hay tanta gente que tiene una imagen totalmente equivocada de Dios! El enemigo ha trabajado a lo largo de los siglos de manera muy efectiva a través de personas y de plataformas, tales como libros o los medios de comunicación, para dar una imagen distorsionada de Dios.

Muchas personas piensan que Dios es cruel, caprichoso y autoritario, inspirados por el mal comportamiento que han visto en algunos cristianos. Otras muchas le ven como alguien contradictorio y distante, que nos deja a nuestra suerte en este mundo. Otros piensan que es una fuerza del universo, y otros creen que es una mera ilusión creada para aliviar a los débiles. 

Tú, sin embargo, le conoces, y sabes que eso no es así. Tus experiencias con Él y lo que Él ha hecho en tu vida, atestiguan que Dios no es ninguna de esas cosas. Y aquí viene lo precioso: tu vida puede tocar esas otras vidas que están confundidas. “¿Cómo?”, te preguntarás. La respuesta: por tus frutos. 

Esto es lo que continúa diciendo Jesús en Juan 15: “En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos” (Juan 15:8). Cuando tu vida rebosa de paz, de gentileza, de interés genuino, de amor por los que te rodean, eso les impacta de una manera profunda. De hecho, tus frutos tienen el poder de romper sus ideas preconcebidas y mostrarles cómo es Dios en verdad. ¡Eso da gloria a Dios!

Amigo/a, eres el reflejo de Dios aquí en la tierra. Tu fruto habla más fuerte que tus palabras, pero no por eso tienes que dejar de hablar. ¡Habla de Dios, y sobre todo ama como Dios! Que tus frutos y tus palabras sean las herramientas perfectas para alcanzar a los demás.

Eres un regalo de Dios para los que te rodean.  

Christian Misch
Author

Pasionado de las nuevas tecnologías y autor de "Un Milagro Cada Día", compartiendo inspiración diaria para seguir a Jesús.