Fecha de publicación 14 de sep. de 2024

🩺 El Dios que sana (Rapha)

Fecha de publicación 14 de sep. de 2024

Una de mis historias favoritas de los Evangelios, es el episodio del paralítico. Aquel que llegó  ante Jesús con la ayuda de sus amigos ¡bajándole por el techo de una casa! (Lucas 5:17-22). Esta historia me encanta porque vemos que Jesús sanaba a las personas, pero lo hacía de una forma holística.

 

Jesús ve al ser humano en forma integral. Él percibió que el paralítico necesitaba una sanidad física, pero mucho más profundamente, necesitaba una sanidad del corazón. Es por eso que antes de sanar su cuerpo, sana su corazón.

 

Por eso me encanta la descripción acerca de Dios que encontramos en el Salmo 103:3: “Él perdona todos tus pecados y sana todas tus dolencias”.

 

Amigo/a, ¡nuestro Dios es un Dios que sana! Sana tus dolencias y enfermedades físicas visibles, como las dolencias ocultas de tu corazón. Por eso, déjame preguntarte, ¿hay algo hoy que necesitas poner delante de Dios para que pueda ser sanado? ¿Algo que tienes guardado en tu corazón y que quizá no has compartido con nadie?

 

Sabes, yo siempre he luchado contra la idea de compartir mis cargas y dolores. Pero hace unos años, Dios me llevó por un tiempo de desierto donde debí aprender a abrir mi corazón y escuchar la voz de Dios a través de otros. Esto fue lo que me ayudó a recibir la sanidad en mi corazón.

 

Por eso, hoy quiero decirte que puedes confiar en que Dios puede y quiere sanarte. Él puede sanarte de tu enfermedad, y también sanar el dolor en tu corazón.

 

Solo está esperando a que vengas y derrames tu corazón delante de Él. A veces también pide que busques ayuda en la comunidad de fe, en su iglesia, así como el paralítico necesito de sus amigos para llegar ante los pies de Cristo para ser sanado. Dios te ha dado una familia espiritual con la que puedes contar. 

¿Hay alguien cerca de ti que pueda ser como esos amigos del paralítico? ¿Alguien con quien puedas ser vulnerable y abrir tu corazón? Quizá Él quiere hablarte a través de esa persona, quizá Él quiera usarla para traer sanidad a tu vida y solo está esperando que tomes la decisión de abrir tu corazón. ¿Te animarías a hacerlo hoy?

No lo olvides nunca: ¡Eres un Milagro!

Eleazar Diaz
Author

Pastor principal de una iglesia y director de un programa de discipulado y misiones en Guadalajara, México. Mi pasión es que cada persona pueda tener una relación intima y apasionada con Dios.