Amigo/a, ¡eficacia comprobada! ✅
Una de las cosas más desconcertantes en la vida cristiana es la aparente “inconsistencia” de Dios.
No sé si te habrá pasado a ti, pero hay ocasiones en las que parece que oras por personas, situaciones o circunstancias, y hay una respuesta clara e inmediata, mientras que en otras ocasiones parece que no hay respuesta de Dios.
He conocido cristianos, de hecho, que tratan la oración casi como si fuese un juego de azar: “Vamos a seguir orando, a ver si hay suerte… A ver si esta vez funciona, y Dios me contesta”. Otros, atribuyen esto a la soberanía de Dios, y piensan que, como Dios es soberano, tiene todo el derecho de decidir no contestarles, e ignorar sus oraciones. Por ese mismo razonamiento, Dios, en Su soberanía, podría dejar de amarles si así lo desease.
Amigo/a, y tú, ¿qué piensas? No sé tú, pero yo no confío demasiado en las personas que son inconsistentes en su carácter, y menos aún de las que son caprichosas. Sin embargo, muchas veces, este es el cuadro que pintamos en nuestra mente con respecto a Dios, aunque no llegamos a decirlo con nuestras palabras… y todo eso, en el fondo, crea una desconfianza hacia Él en nuestro corazón.
La buena noticia es que Dios no es inconsistente. Vamos a completar un poco más el pasaje que estamos analizando esta semana: “Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos...” (1 Juan 5:14-15).
Él no nos oye solo en ocasiones o en momentos particulares, sino siempre: en cualquiera cosa que Le pidamos conforme a Su voluntad. Él es el mismo ayer, hoy y por los siglos, y no cambia. Él es realmente fiel, y nunca rompe Sus promesas.
Amigo/a, ¡Dios siempre cumple Sus promesas! Si percibes en tu vida esa falta de respuesta a tus oraciones, ven ante la Presencia de Dios y pídele que te revele cuál es el problema, y qué debes cambiar. Él quiere guiarte para que puedas orar de manera eficaz (Santiago 5:16), y para que puedas experimentar así milagros increíbles en tu vida.