Amigo/a, 🏰 ¡Destrúyelas! Que no quede ni una en pie
¿Alguna vez has pensado en Dios como si fuese una fortaleza? Él no solo nos da nuevas fuerzas, sino que es como un castillo, como una fortaleza en la que nos podemos refugiar.
Mira cómo comienza el precioso Salmo 27: “Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?” (Salmo 27:1). Sí, Dios es una fortaleza a tu alrededor: en Él puedes sentirte seguro/a.
El enemigo, por su lado, trata también de construir fortalezas en tu vida. Sus fortalezas son diferentes: están construidas a base de mentiras y de engaño, y tienen por objetivo controlar y dominar tu vida, para hacerte un esclavo.
¿Puedes identificar algunas de esas “fortalezas” en tu vida? ¿Tienes quizás complejos o inseguridades? ¿Piensas que jamás conseguirás lo que te propongas, o que eres un fracaso?
Mira lo que dice la Biblia: “porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas…” (2 Corintios 10:4). ¡Dios te ha dado la capacidad de destruir todas esas mentiras de tu vida! ¡Sus armas (la oración, la paz, la Palabra de Dios..) son poderosas!
Amigo/a, hoy es el día de derribar las fortalezas de las tinieblas. En este día fortalécete en el Señor, y con Sus palabras de verdad empieza a derribar cada una de esas mentiras que te esclavizan. Verás que poco a poco, con el paso de los días, te sentirás cada vez más libre.
“Señor, ayúdame a identificar y a derribar todas las fortalezas de mentira que hay en mí. ¡Gracias porque me das el poder de hacerlo! Ayúdame a usar todas Tus armas con sabiduría. ¡Gracias por todo lo que vas a hacer! En el Nombre de Jesús. ¡Amén!”
Fortalécete hoy en el Señor.