Fecha de publicación 28 de jun. de 2021

Amigo/a, ¿danzas?

Fecha de publicación 28 de jun. de 2021

¿Cuándo es la última vez que bailaste de alegría?

Cuando al Arca de la Alianza, que representaba la Presencia de Dios en medio de Su pueblo, fue transportada a Jerusalén, el corazón del rey David estaba tan lleno de gozo que dice la Biblia que “danzaba con toda su fuerza delante de Jehová; y estaba David vestido con un efod de lino” (2 Samuel 6:14). No le importó hacer quizá el ridículo, o lo que otras personas pudiesen decir de él: Su amor por Dios le llevó a danzar con todas su fuerzas ante Él, como un niño que baila cuando está contento.

El Salmo 84 refleja esta misma pasión por la Casa de Dios. Este salmo empieza diciendo: “¡Cuán amables son tus moradas, oh Jehová de los ejércitos! Anhela mi alma y aun ardientemente desea los atrios de Jehová; mi corazón y mi carne cantan al Dios vivo” (Salmo 84:1-2). 

Sí, es verdad: la Presencia de Dios ¡es un lugar tan amable, tan agradable! Mi corazón anhela tanto estar allí donde Él mora, que se ha convertido en un deseo ardiente, en un fuego en mi interior que me lleva a buscarle de lo más profundo. ¿Y tú, también arde tu corazón por Dios y por Su Presencia?

Amigo/a, Dios te invita a vivir en Su casa cada día. A lo largo de esta semana, vamos a analizar claves que se encuentran en el Salmo 84 y que te ayudarán a vivir más cerca de Dios en tu día a día, y a anhelar más estar en Sus atrios. ¿Estás preparado/a para recibir el abrazo de Dios en tu vida?

Eres un/a hijo/a precioso/a de Dios

Christian Misch
Author

Pasionado de las nuevas tecnologías y autor de "Un Milagro Cada Día", compartiendo inspiración diaria para seguir a Jesús.