Amigo/a, 👣 Camina en el Favor de Dios
Seguimos avanzando en esta serie en la que estamos analizando el impacto que la iglesia tuvo en el mundo cuando fue poderosamente impulsada por medio de la acción del Espíritu Santo.
Después de que 3.000 personas diesen su vida a Jesús en aquella primera predicación improvisada de Pedro, la iglesia empezó a crecer de una manera impresionante. En unas horas, pasaron de ser probablemente unos 100, a ser más de 3.000:
Sin embargo, no fue un sencillo cambio de “religión”, por así decirlo. No es que esas 3.000 personas ahora iban a empezar a ir a una nueva serie de actividades, sino que esas personas, al igual que todos los auténticos seguidores de Jesús, experimentaron un cambio real, profundo en sus corazones.
Sus prioridades cambiaron, y Jesús pasó a ser todo para ellos. De hecho, dice unos versículos más adelante que todos los que había dado el paso de dar sus vidas a Jesús, “perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón, alabando a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo” (Hechos 2:46-47)
Fíjate lo que dice este pasaje:
- Perseveraban en su nueva fe en Jesús
- Lo hacían junto a otros cristianos
- Asistían cada día al templo, encontrándose ahí después del trabajo o cuando hubiesen terminado sus responsabilidades cotidianas.
- Se visitaban unos a otros en sus casas, comiendo juntos y tomando la cena del Señor
- Había una alegría generalizada, y, a la vez, una sencillez de corazón en todos ellos
- Y todo eso provocaba un ambiente de alabanza a Dios real, sincero, y en unidad
Como puedes ver, no había individualidad, ni aislamiento, ni orgullo, ni intentos de controlar a los demás… Sencillamente, habían experimentado un nuevo nacimiento, su corazón había cambiado, y anhelaban de lo más profundo de sus corazones estar con sus hermanos y alabar a Dios, mientras aprendían más acerca de Jesús.
Esta expresión tan auténtica de su fe provocó un impacto en su ciudad. De hecho, el versículo de hoy termina diciendo que tenían favor con todo el pueblo.
Amigo/a, un corazón auténtico y sencillo, que ama apasionadamente a Dios y a las personas, siempre encuentra favor y puertas abiertas frente al resto de personas.
Todos estamos cansados de la hipocresía, el orgullo y la manipulación que rigen este mundo. Es por eso que la sencillez y el amor de los que han sido genuinamente tocados por Dios son un soplo de aire fresco que atrae a los que todavía no Le han conocido.
¿Te identificas con el primer amor que expresaban estos cristianos? Te animo a que en este día puedas invertir un cierto tiempo en oración para analizar tu vida, y ver en qué áreas necesitas volver a ese primer amor, para recuperar esa pasión y sencillez por Dios del principio. En el programa de hoy te hablo más al respecto.