🙌🏻 Amistades que te ayudan a adorar

Durante ese tiempo en que luché con la depresión, escuchaba una y otra vez la canción de Al Taller del Maestro de Alex Campos. De alguna manera, en esos días esa canción me daba esperanza.
Recuerdo especialmente a un amigo que cantaba muy bien y sabía tocar la guitarra. Un día, en broma, le pedí que me tocara esa canción durante el tiempo de descanso después de la comida. Para mi sorpresa, por semanas varias después venía a mi habitación con su guitarra y cantaba “Al taller del Maestro”. Lo recuerdo como algo muy especial.
Creo que fue como un año después de haber salido de la depresión, cuando un día le pregunté: “Oye, ¿porque ya nunca vienes con tu guitarra para cantar la canción Al taller del maestro?” Su respuesta fue: “No, es que veo que ya estás bien”.
Yo no tenía idea de que él sabía cuán mal estaba. Pero porque lo sabía es que venía con su guitarra para ayudarme a adorar a Dios en medio de mi dolor. Por eso, aunque hace tiempo que no lo veo (ya que vivimos en diferentes países), siempre lo voy a recordar con mucho cariño.
Me hace recordar una escena del libro de Hechos que es igual de conmovedora, es la escena de Pablo y Silas en la cárcel, enfrentando un momento difícil juntos, pero de una manera muy distinta.
Imagínalo conmigo: dos hombres que han dado su vida por predicar de Jesús, caminando de ciudad en ciudad, anunciando esperanza, echando fuera demonios, plantando iglesias, soportando oposición. Y un día, en Filipos, después de liberar a una joven esclava oprimida, son arrestados injustamente. Son golpeados, humillados y encerrados en el calabozo más oscuro. Y, sin embargo… ahí, en esa celda fría, con las espaldas lastimadas, no se quejan, no se llenan de enojo, no lo que hacen es… cantar.
“A eso de la medianoche, Pablo y Silas se pusieron a orar y a cantar himnos a Dios, y los otros presos los escuchaban” (Hechos 16:25). Amigo/a, ¿cómo puede alguien cantar en medio del dolor? Solo se puede cuando no estás solo. Porque ni las cadenas pueden detener a quienes adoran juntos en la oscuridad.

