🙌🏻 Él nunca te deja
Gloria a Dios, hemos llegado al final de esta serie, hoy daremos el último paso en este recorrido hacia la comprensión del Dios que nunca nos deja solos.
¿Sabes? Aquellos de nosotros que hemos experimentado algún tipo de soledad, en algún momento también luchamos con un miedo muy real… el miedo a ser abandonado(a).
Recuerdo cómo luchaba con ese sentimiento durante mi noviazgo con Shaila. Nosotros tuvimos muchas peleas y conflictos en el noviazgo, y nos tomó unos meses darnos cuenta de que detrás de todos estos conflictos estaba operando este miedo: que la otra persona nos iba a abandonar, que no se iba a quedar para siempre.
Esta lucha es muy real: pensar que la persona amada no se quedará a nuestro lado cuando nos conozca, y vea de cerca nuestros defectos, debilidades y los aspectos de nuestro carácter que nos avergüenzan.
Porque la triste realidad es que si sucede; Amigos que se distancian, familias que se quiebran, mentores que fallan, personas queridas que nos lastiman, y de repente nos da miedo que la próxima persona que dejemos entrar en nuestro corazón vaya a hacer lo mismo.
En medio de esto, es fácil pensar que Dios también se puede rendir contigo, que también te abandonará, pero hoy quiero asegurarte que no, Dios no es como los demás, Él no te deja a mitad de camino.
Mira lo que dice el Salmo 139: 24: “Señálame cualquier cosa en mí que te ofenda y guíame por el camino de la vida eterna”
Me encanta este versículo porque el salmista no se presenta como perfecto, reconoce que puede fallar, que puede herir el corazón de Dios, que se equivoca como tú y como yo. Pero, al mismo tiempo, declara con confianza que Dios no lo soltará, que seguirá a su lado mientras se dirige por el camino de la vida eterna.
Amigo/a, esa es la belleza del amor de Dios: no depende de nuestra perfección, sino de su fidelidad.
Termino esta serie recordando esta hermosa verdad: Dios nunca te dejará, ni te abandonara, por lo tanto, nunca estás solo/a.
