¿Qué fragancia llevas?

2020.09.25@2x-50

Home | Un Milagro Cada Día | Milagros | ¿Qué fragancia llevas?

¿Has viajado alguna vez en transporte público en hora punta?

Recuerdo que, cuando era estudiante, tenía que tomar el metro para ir a la universidad. La línea 6 de metro siempre estaba saturada a esas horas, los vagones estaban llenos a más no poder. ¡Parecíamos sardinas en lata! Al estar tan juntos todos, era fácil respirar la “fragancia” de las personas que teníamos al lado. La mayoría de la veces era agradable, pero de vez cuando a algunos de mis vecinos de vagón les había abandonado el desodorante… =)

A la hora de hablar ocurre algo similar. Es en las distancias cortas, en las conversaciones que mantenemos a lo largo del día, donde podemos respirar tanto la fragancia de las palabras de las personas que nos rodean, como el desagradable olor de los malos comentarios. Es ahí también donde podemos fácilmente desviarnos, y hablar palabras que no convienen, solo por quedar bien con los demás. 

La Biblia dice: “Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno” (Colosenses 4:6). ¡Sí, querido(a) amigo(a), somos la sal del mundo, y como tal nuestras palabras deben contener también esa sal! Piensa en ello cuando estés hablando con otras personas: déjales que respiren la fragancia de Dios a través de ti, que gusten la gracia en tus palabras. El amor reflejado en tus palabras, la amabilidad y el compartir con los demás acerca de Jesús, es lo que hace que tus palabras tengan ese punto de sal que cambia la vida de las personas.

Vamos a orar: “Señor, te doy gracias por lo que estás haciendo en nuestras vidas. Ayúdanos para que nuestras conversaciones estén marcadas por Tu amor y por Tu gracia, para que sepamos cómo contestar a cada uno, y para que lo hagamos de una manera que te agrade. Que no haya ningún tipo de crítica, mentira, queja ni palabra deshonesta en mi vida, Señor, sino que todo lo que diga y haga sea lleno de Ti. En el Nombre de Jesús. ¡Amén!”

¡Eres un Milagro!
Christian Misch

¿Quieres recibir este email diario de aliento en tu dirección de correo electrónico? Solo tienes que suscribirte a “Un Milagro Cada Día” en este formulario.


                 
   
* Al suscribirte, aceptas los términos y condiciones de uso de Jesus.net, así como la Declaración de Privacidad.

Deja un comentario