Amigo/a, 🎁 Es un regalo para ti
¿Has pensado alguna vez en el amor incondicional que un padre terrenal tiene por sus hijos? A pesar de nuestras limitaciones y defectos, los padres desean dar lo mejor a sus hijos. Siendo así, ¿cómo podría ser menos generoso tu Padre celestial, quien te ama con un amor perfecto y eterno?
Amigo/a, Jesús nos asegura que si incluso los padres terrenales, siendo imperfectos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más tu Padre celestial está dispuesto a darte el don supremo: el Espíritu Santo! Este regalo no es simplemente una bendición más entre muchas, sino la presencia misma de Dios en tu vida.
Mira lo que dice su Palabra en Lucas 11:13 (RVR1960): “Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?”
Su presencia en ti es un testimonio del amor y la fidelidad de tu Padre celestial, quien nunca te dejará desamparado. Entonces piensa en esto, ahora puedes acudir a Dios con confianza, sabiendo que él está dispuesto a concederte el Espíritu Santo cuando se lo pidas. No hay requisitos complicados, ni pruebas que superar; solo necesitas acercarte a Dios con humildad y fe. Su espíritu te capacitará para enfrentar cualquier adversidad y te ayudará a mantenerte firme.
Entonces, quiero recordarte hoy, que Dios está listo para darte su Espíritu, si se lo pides. Sin importar la circunstancia que puedas estar atravesando, está aquí para ayudarte.
¡Qué hermoso y maravilloso regalo es tener la presencia misma de Dios en tu vida!
Padre celestial, te agradezco por tu infinita bondad y generosidad hacia mí. Te pido que me concedas el don del Espíritu Santo, para que pueda vivir en comunión contigo. Quiero ser transformado por ti. En el nombre de Jesús. Amén.
