Amigo/a, 🤔 ¿Qué es lo que has decidido?
¿Los problemas de la vida te han quitado la sonrisa?
Hace unos años experimenté una situación de estrechez económica. Mi mente se agobiaba al pensar en cómo hacer frente a los próximos pagos, y notaba cómo eso me había afectado también a nivel espiritual. Una tarde, mientras pensaba en todo eso, me di cuenta de que no podía seguir así. ¿Creía realmente que Dios cuidaba de mí? Entonces no tenía motivo para sentirme agobiado.
Decidí creer que Dios iba a ayudarme con ese problema financiero. Empecé a darle gracias por la solución que ya estaba de camino, y le pedí que me diese sabiduría para saber qué pasos tenía que dar. Las tinieblas que me rodeaban se desvanecieron en cuestión de minutos, y un gozo profundo inundó mi corazón. ¡Tenía tanto gozo que me puse a cantar! =)
Cada día tomé la decisión de confiar y darle gracias al Señor por la solución que estaba ya de camino. Mi situación por fuera seguía siendo la misma, pero mi corazón ahora estaba lleno de fe y de gozo. Por hacer la historia corta, el Señor me dio una serie de ideas que me permitieron recibir un aumento de sueldo justo en el momento en el que más lo necesitaba. ¡Gloria a Dios!
Cuando Pablo y Silas fueron encarcelados en Filipo, fueron azotados y puestos en la cárcel más profunda. “Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban himnos a Dios; y los presos los oían. Entonces sobrevino de repente un gran terremoto…” (Hechos 16:25-26). ¡Amigo/a, su corazón estaba tan lleno de gozo que no pudieron evitar ponerse a cantar aún en medio de esa situación! Todos les oyeron, y todos fueron testigos del enorme milagro que aconteció después. ¡Sí, cuando decides gozarte en Dios, abres la puerta a Sus milagros en tu vida!
Que en este día tu corazón descanse y se goce en el Señor.
