Amigo/a, 🪔 La unción de Dios reposa sobre ti
¡Qué precioso es poder analizar en profundidad la Palabra de Dios! Continuamos avanzando en esta serie, y hoy vamos a ver esta frase tan especial que dice: “Unges mi cabeza con aceite” (Salmo 23:5)
Seguimos en el contexto de ayer, en el que nuestros angustiadores (el enemigo y toda la corte de las tinieblas) no pueden hacer nada más que estar llenos de envidia mientras ven cómo Dios y Sus ángeles extienden un banquete ante nosotros.
En medio de esa comunión gloriosa con Dios, hay una cosa extraordinaria que ocurre: el Rey unge nuestra cabeza con aceite.
Él nos sella con Su preciosa unción, la cual refleja no solo el llamamiento que Él tiene para nuestra vida, sino que Él mismo nunca se separará de nosotros, ya que por medio de Su Espíritu Santo nos guiará para cumplir Sus planes a nuestro lado.
Si ayer nuestros enemigo tenían envidia, hoy tienen miedo al ver el sello de la Unción del Dios vivo en nuestras vidas. ¡Parece que las cosas van de mal en peor para ellos, en la medida en la que progresamos en este Salmo! ¡Como debe ser! =)
Amigo/a, el Sello de la Presencia de Dios está en tu vida, ¡y eso hace que el enemigo huya de ti!
En este día, ven ante la Presencia de Dios y deja que unja tu cabeza con Su aceite Santo. Pídele que te inunde más con Su preciosa unción, y que el Espíritu Santo pueda tener más libertad para guiarte y hacer todas las cosas que Él ha preparado para ti.