Amigo/a, ¿25 años?
¿Llevas tiempo esperando que Dios cumpla algunas de Sus promesas en tu vida? Si hay un personaje de la Biblia que pudiese comprender cómo te sientes, ese sería Abraham.
Abraham había recibido una promesa de parte de Dios: Él le dijo que tendría descendencia, y que sería el padre de multitudes. Eso parecía altamente improbable desde un punto de vista humano, sobre todo teniendo en cuenta que tanto Abraham como su mujer Sara eran ya de edad avanzada, y que, además, Sara era estéril.
Sin embargo, Abraham decidió creer de todo corazón esta promesa increíble de Dios. ¿Sabes cuánto tiempo tuvo que esperar Abraham para ver el cumplimiento de esta promesa? Nada más y nada menos que 25 años. ¡Wow! ¿Te imaginas?
La Biblia dice de él que, “habiendo esperado con paciencia, alcanzó la promesa” (Hebreos 6:15). Su fidelidad y su paciencia le permitieron alcanzar una de las promesas que más impactó la historia. De hecho, durante ese proceso de espera, Abraham fue creciendo hasta convertirse en el padre de la fe, y en amigo de Dios. ¡Sin duda, mereció la pena la espera!
Sí, Amigo/a, la paciencia es clave para alcanzar las promesas de Dios para tu vida. Algunas promesas que Él nos da se cumplen casi de inmediato, otras tardan semanas, otras meses, y otras, años. En mi propia vida he podido experimentar esto muchas veces, y aunque algunas de las cosas me hubiese gustado recibirlas antes, he podido comprobar una y otra vez que los tiempos de Dios son realmente perfectos.
Amigo/a, Dios no se ha olvidado de las promesas que te ha dado, al contrario: Él está trabajando en tu vida y está preparándolo todo para que puedas recibirlas en el momento y de la forma perfecta. ¡Sé fiel en dar los pasos que Él te pida dar, ten paciencia, y verás cosas increíbles!
Te llevo en mis oraciones y en mi corazón.
