✅ Una nueva oportunidad

¿Sientes que has cometido errores y te parecen irreparables?

Esta es la historia de una mujer que al ser sorprendida en el acto mismo de adulterio fue llevada ante Jesús por los fariseos y escribas para ser juzgada. 

Intenta imaginar cómo pudo haberse sentido ella en ese momento. No obstante, en esta situación, vemos el amor redentor de Jesús. Aunque no pasa por alto el pecado ni lo justifica, ofrece una perspectiva transformadora: la redención y una nueva oportunidad.

Mira lo que dice  la Biblia en Juan 8:3-4 (RVR1960): “Entonces los escribas y los fariseos le trajeron una mujer sorprendida en adulterio; y poniéndola en medio, le dijeron: Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo de adulterio” 

¿Y qué hizo Jesús? 

Esto lo podemos ver en Juan 8:10-11 (RVR1960): “ Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó?  Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más”.

Esta declaración llena de amor y misericordia, no solo le otorga el perdón, sino que también le presenta la oportunidad de un nuevo comienzo. Esta mujer se encuentra cara a cara con la gracia de Dios, una gracia que perdona, restaura y brinda una nueva identidad.

Quizás al igual que la mujer adúltera, ¡sientes que necesitas el amor redentor de Jesús! 

Quiero recordarte que Él no te condena; que no hay error tan grande que Jesús no pueda reparar,  al contrario, desea acercarse a ti y revelarte que, sin importar los errores que hayas cometido, anhela otorgarte una nueva identidad. Y así como lo hizo con esta mujer, Jesús te ofrece la redención que Él pagó en la cruz por ti.

Por consiguiente, este podría ser un buen momento para hablar con Él. Exprésale tus sentimientos y comparte lo que hay en tu corazón.

Oro por ti, para que tus ojos sean abiertos a su amor inagotable.

¡Y no olvides nunca: Eres un Milagro!