⌚️ ¡Sé libre de la inconstancia!

Estos últimos días hemos hablado acerca de los efectos del doble ánimo en nuestra vida.

El pasaje de esta semana termina diciendo: ”El hombre de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos” (Santiago 1:8).

Fíjate en la fuerza de esta declaración: el hombre que experimenta ese doble ánimo, lo manifiesta en todas las áreas de su vida, en todos los caminos por los que transita.

Ese doble ánimo encuentra su ADN en la duda, en la inseguridad, en la falta de claridad, en las falsas concepciones en relación a Dios… y, como tal, nos afecta en todos nuestros caminos, como asegura este versículo.

Querido/a amigo/a, quizá has estado luchando con esa inconstancia y no sabes muy bien de dónde viene, ni por qué siempre te cuesta mantenerte estable y avanzar en las diferentes áreas de tu vida.

Si ese es tu caso, si analizas tu vida bajo la perspectiva de lo que hemos visto a lo largo de estos días, probablemente descubrirás que ese doble ánimo ha estado presente en tu vida en diferentes formas, quizá sin darte cuenta.

Esos pensamientos son los que te han saboteado, dándote una doble mentalidad que al final te impide permanecer estable en la verdad, y avanzar.

Querido/a amigo/a, ¡hoy es tiempo para poner de nuevo las cosas en su sitio! Hoy es el día de levantarte y aferrarte como nunca antes a Dios y a Sus promesas, para que las falsas ideas y mentiras de las tinieblas sean echadas de tu vida por medio de la fe

Sí, hoy es el día de volverte estable como una roca, lleno de gozo de Dios por medio de la certeza y de la convicción de la fe en el Espíritu. ¡Es tiempo de seguir avanzando con fuerza y con constancia, y de alcanzar los planes que Dios ya tiene preparados para ti!