¡Puedes ser libre de la esclavitud!

Cada año, los comercios nos recuerdan que es temporada de Semana Santa. Esto es especialmente cierto en las pastelerías, donde encontramos elaboraciones de chocolate como los famosos “conejitos de Pascua” o los “huevos de Pascua”, así como otros dulces típicos de esta época del año.

La Semana Santa, sin embargo, va más allá de los dulces. Nos recuerda la muerte y resurrección de Jesús, ¡Su victoria sobre la muerte! Este es el corazón del mensaje del Evangelio: “¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros” (Romanos 8:34).

¿Sabes por qué a la Semana Santa se le llama también “Pascua”?

La Biblia habla acerca de la primera Pascua en el Antiguo Testamento, en Deuteronomio 16:1, donde dice: “Guardarás el mes de Abib, y harás pascua a Jehová tu Dios; porque en el mes de Abib te sacó Jehová tu Dios de Egipto, de noche”

Sí, la Pascua judía conmemora el día en el que Dios liberó a Su pueblo Israel de la esclavitud. ¡El pueblo de Dios salió finalmente de Egipto, tras 400 años de servidumbre!

Y de la misma manera en la que, en la fiesta judía de la Pascua, un cordero tenía que ser sacrificado, ¡Jesús se convirtió en aquel Cordero que dio su vida para que pudiésemos ser libres de nuestros pecados, y tener así nueva vida en Él!

De hecho, ¿sabías que Jesús fue crucificado en medio de la celebración de la fiesta judía de la Pascua? Jesús dio un significado más profundo a la Pascua judía, ya que Su sacrificio nos permite de “salir de Egipto”, del lugar de esclavitud a la auténtica libertad. ¡Qué liberación para todos aquellos que nos hemos convertido en hijos de Dios! Es una victoria que celebramos durante estos días de Semana Santa.

Sí, querido(a) amigo(a), la Pascua está muy lejos de ser una festividad de chocolate y huevos pintados. ¡Es la celebración de la victoria de Dios, de tu liberación y de tu redención a través de la sangre de Jesús! Tienes muchos motivos para celebrar Semana Santa =)

Gracias por existir,
Éric Célérier