🍊 Malos y buenos

Cuando vivimos en la bendición de Dios y en ese deseo constante de bendecir a los demás, es cuando nuestra vida adquiere un significado pleno. 

Hay algo muy especial en el hecho de transmitir la bendición de Dios hacia los demás en nuestro día a día. De hecho, cuanto más lo hacemos, más nos parecemos a Dios, porque, como dice la Biblia, Él “hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos” (Mateo 5:45).

El comportamiento de las personas no cambia el comportamiento de Dios. Él bendice a todos con los pequeños y los grandes detalles de la vida, aun a aquellos que le maldicen y que no quieren saber nada de Él. Nosotros, sin embargo, cuando alguien nos hace daño, ¡nuestra tendencia humana sigue queriendo devolver el golpe! Si fuese por nosotros, ¡les dejaríamos sin sol y sin lluvia! =)

Querido/a amigo/a, no dejes que las malas actitudes de los demás se te peguen. Pon a un lado los enfados, el orgullo y todo lo que no es según el corazón de Dios, y proponte vivir y manifestar la bendición perfecta de Dios en todo lo que hagas. 

Que las personas puedan encontrar siempre en ti a alguien lleno de amor, honesto, desinteresado, generoso… alguien que brilla con la luz del Señor, y que es una luz para ellos en medio de sus tinieblas. ¡Sí, bendice a los demás, y disfruta de ser un canal de bendición! 

Dios te llama a ser una luz en este mundo. ¿Cómo podrías bendecir más a las personas que te rodean en este día? Dedica unos minutos en oración, y pídele a Dios que te revele qué hacer y cómo hacerlo, que te dé nuevas ideas para que puedas compartir Su amor y bendición con los demás.