Cuando Dios te dice “STOP”…

Solo falta un día para empezar este nuevo año. En unas cuantas horas estaremos ya en 2019, y comenzaremos como todos los años a intentar cumplir esos propósitos de Año Nuevo que nos hemos hecho en estos últimos días. Sin embargo, la experiencia nos demuestra que, al cabo de unas semanas, la mayoría de personas han abandonado los propósitos que se habían marcado en Año Nuevo. ¿Por qué? Para ser capaz de cumplir esos propósitos tenemos que llevar a cabo una serie de acciones diarias, que nos permitan progresivamente alcanzar los objetivos que nos habíamos fijado. Es por ese motivo que, a lo largo de esta primera semana del año, me gustaría invitarte a conocer 7 hábitos extraídos de mi propia rutina cotidiana que te ayudarán a empezar este nuevo año con buen pie :-)

En ocasiones nos toca acelerar el ritmo y hacer “sprints” para conseguir cumplir con nuestros objetivos, y avanzar así en nuestros proyectos. Pero, ¿y si Dios nos estuviese diciendo hoy: “Estad quietos, y conoced que yo soy Dios” (Salmo 46:11)?

Cuando Dios dice “STOP” en Su Palabra, es porque tiene una revelación importante que darnos. Desea atraer nuestra atención hacia algo en particular. En este pasaje que hemos leído antes, nos pide que:

• Dejemos de movernos en nuestras fuerzas (para dejar que sea Dios quien actúe)
  
• Dejemos de dar vueltas a las cosas (sobre todo a malos pensamientos)
  
• Dejemos de hablar y hablar (para así poder escuchar la Voz de Dios)
  
• Dejemos de preocuparnos (porque Dios es nuestro refugio, Él cuida de nosotros)
• Dejemos de querer tener absolutamente todo bajo control (porque Dios es el Rey, y Él es el que planifica y ordena)
  

La lista podría seguir y seguir. Cuando Dios nos dice que estemos quietos, es porque Él desea:

• Atraer nuestra atención hacia Él
  
• Darnos la oportunidad de reconocer que Él es Dios.

Así es, Él es el Dios Todopoderoso, el gran Yo Soy, el que no tiene principio ni fin. Él es el Creador del universo, y aunque en Su Omnipotencia Él hubiese podido crear todo lo que existe en un solo día, Él escogió hacerlo en una serie de días, de pasos ya planeados de antemano.

Antes de empezar a hacer tus planes para este nuevo año que comienza, Dios te pide que pares y que le escuches, que esperes Sus directrices y Su guía para tu vida. Él quiere mostrarte, día a día,  paso a paso, Sus proyectos de paz y de bendición para Tu vida. Este es, sin duda, el primer hábito para empezar bien: ¡Escuchar la voz de Dios, para así caminar por el camino que Él nos marca!

Sí, querido(a) amigo(a), es hora de que pares y que escuchas las directrices que Dios tiene para tu vida en esta nueva etapa.

Te invito a que ores conmigo: “Padre, te doy las gracias por ayudarme a desarrollar este nuevo hábito en mi vida de pararme a escuchar Tu voz. Señor, guíame en cada decisión que debo de tomar. ¡Que mi vida te glorifique! En el Nombre de Jesús. ¡Amén!”

Gracias por existir,
Éric Célérier