🗯 Pensamientos mentirosos

Nuestro doble ánimo viene muchas veces sencillamente porque no conocemos el corazón de Dios. No conocemos bien Su naturaleza, y eso nos lleva a pensar cosas de Él que no son verdad.

Por ejemplo, creemos que Dios es bueno y que Él quiere nuestro bien, pero a la vez creemos que Dios no quiere darnos todo lo que deseamos. Frases populares como la de “Dios aprieta pero no ahoga” a veces entran en nuestra mente, y nos lleva a desarrollar una visión de Dios que no tiene nada que ver con Él.

La verdad es que Dios te ama, porque es tu Padre, y quiere lo mejor para ti. De verdad: Él quiere lo mejor para ti. ¿Lo crees?

Mira lo que dice la primera parte del pasaje de esta semana: “Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada” (Santiago 1:5). Fíjate cómo lo expresa:

• Si tienes necesidad de algo (en este caso sabiduría), pídeselo a Dios
• Él da siempre a todos, porque no hace acepción de personas (tú no eres la excepción)
• Él da abundantemente, no con cuentagotas, porque es realmente generoso.
• Y Él da sin reproche. No te echa en cara el que le pidas cosas, sino que te anima a que lo hagas.

El pasaje termina diciendo que Dios contestará tu petición, y que en efecto te lo dará. No es solo que Él desee bendecirte, sino que tienes la promesa de que Él lo hará. ¡Él se regocija tanto en darle cosas a Sus hijos!

Quizá a estas alturas estés pensando: “Bueno, hay muchas cosas que le he pedido a Dios pero nunca me las ha concedido, así que no sé yo…”. Si ese es tu caso, te quiero invitar a que mantengas durante esta semana un espíritu abierto, ya que hay varias cosas que pueden estar bloqueando esa bendición de Dios sobre tu vida, y la primera es tu forma de ver a Dios.

Si ves a Dios como alguien severo, alguien en quien no puedes realmente confiar, caprichoso, autoritario… esa visión te impedirá recibir cualquier cosa de Él. Es parte de ese doble ánimo: por un lado crees que Dios es bueno y es amor, pero por otro crees todas esas otras cosas que en el fondo contradicen la bondad de Dios… ¡No tiene sentido!

Querido/a amigo/a, ¡arranca de tu vida cualquier pensamiento que se levante contra Dios! Dios es realmente bueno, es el mejor Ser que jamás haya existido, y cualquier tipo de ofensa o mal pensamiento que albergues contra Él es una mentira de las tinieblas que está destinada a bloquearte.

En este día, pídele a Dios que te ayude a experimentar más Su bondad en tu vida, y a entrar en Su bendición plena. Mañana hablaremos sobre una clave que te ayudará a afianzarte más en la verdad de Dios.