🟢 ¡No vuelvo atrás!

¡Querido/a amigo/a, estoy tan contento de que podamos empezar una nueva semana juntos, y que podamos seguir creciendo en nuestra relación con Dios!

Estoy convencido de que has escuchado varias veces esa canción que tiene como coro: “No vuelvo atrás, no vuelvo atrás…”

Cuando experimentamos la obra de Dios en nuestras vidas, el cambio es tan grande que hay un clamor en nuestros corazones: el de no volver atrás.

Las cosas del pasado no pueden compararse con el amor y la paz de Dios que experimentamos cuando le conocimos. ¡Tenemos una nueva vida, y no queremos saber nada de la antigua!

La mejor manera de no retroceder es seguir avanzando. Es cuando nos paramos y nos estancamos que podemos, sin casi darnos cuenta, deslizarnos de nuevo en las cosas del pasado… pero cuando seguimos caminando hacia delante, ¡no tendremos nada que temer!

Es por eso que me gustaría analizar contigo esta semana algunas claves de este pasaje tan especial que siempre me ha inspirado a seguir adelante. Este pasaje se encuentra en Hebreos 12:1-2, y dice:

“Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios.”

¿Qué te inspira este pasaje? A mí, lo primero que me viene a la mente es:

• Apártate
• Corre
• Mira a Jesús

Ya de por sí esto me inspira, pero ¡hay mucho más que analizaremos juntos esta semana! =) Creo que vas a ser realmente inspirado a través de ello
Querido/a amigo/a, ¡sigue adelante! Las promesas de Dios te esperan