🎁 Es tiempo de compartir

Hemos visto a lo largo de estos días cómo la Presencia de Dios y la unción de Su Espíritu no solo transforman nuestra vida, sino que nos preparan para transformar la vida de los demás. 

Al analizar el pasaje de esta semana desde el principio, vemos que dice que “El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres…”  (Lucas 4:18)

La primera misión de la unción, como podemos ver en este pasaje, es compartir las buenas nuevas que hemos recibido con los demás.

¡Ese es siempre el primer deseo de Dios, y a lo que somos llamados: a compartir nuestra fe con los que más lo necesitan! 

Quizá mil dudas inunden tu espíritu, ya que puede que pienses que no sabes hablar de Dios a la gente, o que tengas miedo de ser rechazado si lo haces… Pero fíjate en lo que dice este pasaje: has sido ya ungido para ello. 

Al final, la clave es sencillamente compartir lo que hay en nosotros con los demás de una manera natural. Y en ese proceso, Dios quiere también inspirarte para que cada vez crezcas más en ello y que seas más efectivo. 

Pero recuerda: Ya tienes la unción para poder compartir las buenas nuevas con cualquier persona, especialmente a aquellos que son pobres de espíritu, a lo que reconocen su necesidad de Dios. 
Querido amigo, no estás solo: el Espíritu Santo está contigo. Así que déjate guiar por Él, y comparte a Cristo de la mejor manera que puedas. ¡Sin duda verás un fruto precioso, tanto en tu vida como en la de los demás! =)