✍🏻 Dios te habla proféticamente

Oro para que el Señor esté encendiendo más Su Fuego Santo en tu vida, como vimos ayer, y para que te sientas cada vez más avivado en Su Presencia. ¡Dios tiene tantas cosas preciosas preparadas para ti!

Seguimos avanzando con esta serie de versículos cortos pero poderosos, y hoy vamos a analizar el quinto, que dice: “No menospreciéis las profecías” (1 Tesalonicenses 5:20).

Desde que conocí a Jesús, hace más de 20 años, he tenido siempre un anhelo profundo por todo lo profético.

La profecía no es más que recibir un mensaje de Dios para nuestra vida. Este mensaje siempre tiene el objetivo de edificar, exhortar y consolar (1 Corintios 14:3), y sin duda, “la palabra profética más segura”  que tenemos es la Palabra de Dios (2 Pedro 1:19). ¡Dios nos habla de una manera tan directa a través de las Escrituras!

Es por eso que es tan importante estar atentos a lo que el Señor nos quiere decir, porque Él nos habla constantemente, y no solo a través de Su Palabra. Si estamos atentos, podemos escuchar Su voz en las diversas situaciones del día a día, ¡y de una forma muy especial en la oración!

En mi caso, de hecho, Dios suele hablarme habitualmente a través de pensamientos, y especialmente de una manera visual, con imágenes o incluso como pequeños clips en mi mente. Estos pueden ser acerca de cosas del pasado, como recuerdos, o pueden ser cosas totalmente nuevas que nunca he pensado anteriormente.

A lo largo de estos años he aprendido que, cuando estoy atento y le pregunto al Señor sobre esos pensamientos, ¡muchas veces me quedo sorprendido sobre la forma en la que Él me habla a través de ellos!

A veces hay pasajes de la Biblia que nos tocan, recuerdos que nos vienen a la mente, sueños, sensaciones, impresiones… pero, a pesar de que nos damos cuenta de ellos, no les prestamos realmente atención. ¡Y sin duda, muchos de ellos son enviados por Dios para hablar a nuestra vida y a nuestra realidad presente!

Querido/a amigo/a, ¡no menosprecies esos mensajes de Dios para tu vida! A veces es fácil ignorarlos, pero si estás atento y tienes esa disposición de preguntarle siempre a Dios, ¡serás tremendamente bendecido por ellos!
En el programa de hoy, de hecho, voy a compartir contigo más acerca de este tema tan apasionante de la profecía y de escuchar a Dios en tu día a día. ¡Creo que te va a bendecir enormemente! Puedes verlo haciendo clic en este enlace.