Amigo/a, 🤔 ¿Qué pasa cuando Jesús parece no responder?
¡Oré intensamente por ese préstamo que nunca llegó! Hace dos años, recuerdo haberle pedido a Dios que mejorará nuestra economía, en aquel momento enfrentamos una situación bastante difícil, Dios respondió, pero no de la manera que yo había imaginado.
Amigo/a, ¿Te ha sucedido que después de haber orado fervientemente por algo, Dios haya respondido de una manera diferente a lo que esperabas? Uno/a podría quedar herido/a, sobre todo con nuestro Padre celestial, por no recibir la respuesta esperada.
Una de las cosas que he aprendido a través de mi caminar con Cristo: ¡Es que Él siempre desea lo mejor para ti! Es un buen Padre ¡Somos sus hijos/as! La Biblia dice en Mateo 7:11 (RVR1960): “Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará buenas cosas a los que le pidan?”
¡No te enojes con Dios, confía en Él! Él conoce exactamente lo que necesitas y te lo dará en el momento oportuno, con un corazón agradecido, espera la mejor respuesta.
Amigo/a, ¡Tu Padre quiere darte lo mejor! Descansa en Jesús.
En este momento, te invito a que te enfoques en tres cosas buenas que pueden estar pasando en tu vida ahora y comiences a agradecer a Dios por ellas ¡Un corazón agradecido mueve la mano de Dios!
Comencemos nuestra oración: “Padre celestial, quiero empezar expresándote mi profundo agradecimiento por enviar a tu Hijo, Jesucristo, para mi salvación y redención. Reconozco que, en ocasiones, he sentido ofensa hacia ti, y quiero pedirte perdón. Sé que no me debes nada, y confío plenamente en que las respuestas a mis oraciones llegarán en tu tiempo perfecto, pongo mi confianza en ti. En tu nombre Jesús. Amén”