💝 Comparte ese amor

A lo largo de esta semana, hemos desarrollado 6 objetivos que, sin duda, revolucionarán tu vida en la medida en la que los pongas en práctica:

1. Medita cada día 5 minutos en la Biblia
2. Proclama a diario tu lista de declaraciones
3. Habla más con Dios
4. Invierte más tiempo en el Lugar Secreto
5. Déjate guiar por el Espíritu en tu día a día
6. Sé agradecido en todo momento

Hoy vamos a ver el último de todos, y que, al igual que los anteriores, es tremendamente poderoso.

Como veíamos ayer, la gratitud tiene un impacto profundo en nuestras vidas. Cuando tenemos esa gratitud de manera constante en nuestro corazón, empezamos a ver a las personas y a las circunstancias de nuestra vida de una manera diferente.

Esa gratitud nos lleva a valorar y a amar más a cada persona y elemento de nuestra vida, porque podemos ver la mano de Dios en ellos.

Mira lo que dice el apóstol Pablo a la iglesia: “Y andad en amor, como también Cristo nos amó, y se entregó a sí mismo por nosotros…” (Efesios 5:2)

Sí, querido amigo, somos llamados a caminar en ese amor. Fíjate que este pasaje no dice que tenemos que quedarnos quietos en amor, sino que nos dice que tenemos que “andar” en ese amor.

El verdadero amor siempre tiene acción: nos lleva a avanzar y a buscar bendecir a las personas que nos rodean de una forma activa.

Este es el séptimo objetivo para este año: “Comparte siempre el amor de Dios”. 

Querido/a amigo/a, hay muchas personas de tu alrededor que necesitan el amor de Dios, y están esperando a que alguien les pueda guiar hacia Él.

Estés donde estés, ya sea que tengas prisa o que tengas tiempo de sobra, aprovecha para compartir ese amor de Dios en la medida de lo posible con la gente que te rodea.

¡Que el amor de Dios en tu vida te lleve a amar más a cada una de las personas que se cruce por tu camino, y que muchas de ellas sean impactadas por el amor de Dios!